La heroica hazaña del tanque \»Fray Bentos\»

Homenaje 90 años después
Por René Boretto Ovalle

El lugar que para cincuenta mil británicos y cuarenta mil alemanes había resultado el sitio para sus tumbas, hoy día es un campo de labranza. La planicie suavemente ondulada y de color verde, no tiene siquiera unas trazas como para hacerlo parecer al lugar donde cientos de cientos de miles de soldados lucharon para poner tope al avance de los nazis en la Primera Guerra Mundial.
En esta zona hay una pequeña ciudad belga llamada Ipres. Tomó el nombre de “iperita” que era como se le llamaba al gas mostaza que los alemanes usaron cruentamente contra sus enemigos. Aprovechando el viento en contra de los atacantes aliados, miles de bombas de humo desparramaban el terrorífico gas que dejaba ciegos a los hombres y los inutilizaba por completo.
Ypres fue un sitio verdaderamente histórico. Allí se dio uno de los primeros usos de los tanques de guerra, intentando pasar por encima de las trincheras que se movían apenas metros hacia delante o hacia atrás, al costo de miles de vida en cada intento de llegar a las líneas alemanas. Cuando en agosto de 1917 se produjeron estas batallas utilizando los tanques recién inventados, nadie contaba con la sorpresa del terreno. La geografía ahí era totalmente incongruente con el desplazamiento de estos pesados tanques, porque la napa freática estaba a menos de un metro de profundidad, a lo que se agregó un clima lluvioso. Tanto los soldados como los tanques, quedaban enterrados. Unos muertos y otros inutilizados para su acción.

Allí donde se contabilizaron 90.000 vidas humanas perdidas en pocas semanas, se reunieron recientemente hombres, mujeres, niños, instituciones, grupos militares y ex combatientes, para inaugurar un gran monumento en homenaje a esos hombres valientes que perecieron en el pedazo de suelo más caro pagado en la historia: unos pocos kilómetros cuadrados, costaron casi cien mil vidas!.
En la localidad de Poelkapelle, se rindió finalmente homenaje a los tanquistas y soldados que murieron en esos trágicos momentos, inaugurando el llamado “Tank Memorial Ypres Salient”. Coros infantiles actuaron, representantes de los ejércitos desfilaron y gran cantidad de familiares descendientes de los muertos allí, se dieron cita en una ceremonia de tocante emotividad. El monumento conmemora el Cuerpo Británico de Tanques que luchó y cayó en Ypres. Sus asaltos fueron realizados en situaciones atroces. Estos hombres valientes lucharon contra hombres igualmente valientes, atrincherados o peleando en el mismo terreno. El 9 de octubre de 1917, los ocho tanques que lucharon aquí, se hundieron en el fango o fueron destruidos. Desde entonces, el lugar es llamado por los lugareños como “el cementerio de tanques”.

UNA HISTORIA DE HEROISMO SIN PAR: FRAY BENTOS PRESENTE.
De los tanques atacantes, uno de ellos había sido bautizado con un nombre que nos es muy familiar: “FRAY BENTOS”, porque los nueve tripulantes que lo manejaban dijeron haberse sentido adentro de la máquina como carne enlatada de la que comían todos los días.
Mucho nos sorprendemos hoy día de las cosas que relacionan a Europa con Fray Bentos o a Fray bentos con aquella Europa de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Como aquí nosotros solamente criábamos las vacas para sacrificarlas, faenarlas, molerlas y convertirlas en extracto de carne o en corned beef, no nos enterábamos de la otra vida de ese producto que apenas salía del puerto del ANGLO se convertía en un elemento crucial para alimentar a los civiles y a las tropas en Europa, durante los casi 130 años en que desde este pequeño puerto sudamericano se enviaban por miles de toneladas los diferentes productos.
Hoy día, ha sido un trabajo interesantísimo encontrar, clasificar, interpretar y convertir en documentos históricos todo lo que hemos podido conseguir de esa “otra historia” de los productos fraybentinos. Justamente, y gracias al contacto con un historiador inglés, pudimos rescatar la increíble historia de un tanque de guerra británico que tuvo un accionar tan valiente que pasó su nombre a ser famosísimo.

He aquí la historia:  ““Quise compartir este cuento único e interesante de un tanque y su equipo durante la Tercera Batalla de Ypres, en agosto de 1917.
Justamente al sur de Saint Julien y cerca de la Colina 35, los alemanes habían destruido varias compañías de ejército británicos cuando ellos asaltaron los puntos estratégicos y trincheras en la región.
Ocho tanques de Mark  IV pertenecientes al llamado Batallón \»F\» del Cuerpo de Tanques británico marcharon en apoyo de la infantería para atacar y tomar las líneas alemanas. Los tanques,  habían tomado la letra \’F\’ para identificarse con sus respectivos nombres. Los tanques eran: \»Faun\», \»Fay\», \»Fiducia\», \»Foam\», \»Fritz Phlattner\», \»Fiara\», \»Fairy\» y \»Fray Bentos\».
El grupo de tanques salió a cumplir su misión a las 4.45 de la mañana el 22 de agosto. El tanque F 41 llamado \»Fray Bentos\», estaba bajo el mando de un teniente llamado G. Hill.
Cada tanque tenía un punto asignado en la línea alemana para asaltar. El comandante de batallón, el Capitán Richardson había optado liderar la avanzada a bordo del F 41 \»Fray Bentos\». Los defensores alemanes ubicados en un punto alto al que llamaron \’Gallipoli\’ comenzaron a defenderse con ametralladoras de gran calibre y las balas de rifle comenzaron a  zumbar por todos lados y rebotaban contra las placas de hierro de los cascos de los tanques.
El teniente Hill, al mando del Tanque “Fray Bentos” fue herido en el cuello y el comandante Richardson que estaba en la tripulación del \»Fray Bentos\» intentó tomar la delantera para dirigir el ataque con tan mala suerte que cayó en una trinchera abandonada, quedando a disposición del fuego alemán.  La infantería alemana de inmediato rodeó por los flancos al \»Fray Bentos\» y lo incendió. El comandante Richardson intentó salir del tanque y buscar ayuda, pero el fuego era demasiado intenso. Otros dos tripulantes intentaron salir fuera para intentar sacar el tanque de la zanja, pero uno de ellos murió en el intento. El tanque atrapado estaba a unos 500 metros delante de la Brigada 44 de Montañeses quienes intentaron asistir al tanque, pero no lo consiguieron y perdieron como 60 hombres. Las unidades Scottish Rifles y Black Watch  relevaron a los Montañeses, con pérdida de muchos hombres sin lograr avanzar más que 100 metros.
La tripulación del \»Fray Bentos\» usaba sus armas para atacar como podía a los alemanes, convirtiéndose en un verdadero bunker metálico. Los británicos en este punto, pensaron que el tanque había sido capturado por los alemanes y comenzaron a disparar ellos mismos sobre el tanque atrapado. Un Sargento de la tripulación del \»Fray Bentos, llamado Missen se deslizó valientemente y salió, esquivando las balas de los francotiradores y el fuego de ametralladora para alcanzar las líneas británicas e informarles que la tripulación aún estaba viva y luchando.
En estas circunstancias y teniendo en cuenta que los alemanas disparaban constantemente desde la Colina 35, la situación era desesperada y horrible. Varios hombres de la tripulación del tanque estaban heridos y requerían asistencia médica.  El calor de agosto, el humo, la incómoda ubicación del tanque caído dentro de la trinchera, debe haber sido terrible.
Los otro siete tanques continuaron cada uno con lo suyo, tratando de alcanzar sus propios objetivos. Sin radios, ellos no tenían ninguna idea que le estaba pasando al F 41. A la noche del día 23, las tropas alemanas se precipitaron sobre el tanque tratando de ingresar a él por la escotilla superior, pero los tripulantes, encerrados y sólo con sus revólveres, lograron ahuyentarlos. Los alemanes entonces se empecinaron contra el tanque disparándole constantemente y procurando traspasar la armadura con sus balas.
La tripulación se aguantó hasta la noche del 24 de agosto y el comandante Richardson ordenó intentar abandonar el tanque y llegar a las líneas británicas, lo que consiguieron todos sin perder un solo hombre. Las tropas escocesas estaban alborozadas y maravilladas por la valentía de los tanquistas. El comandante Richardson, ya a salvo en sus propias trincheras, podía ver la infantería alemana como un enjambre alrededor del tanque que pronto fue incendiado para inutilizarlo totalmente.
El grupo del tanque \»Fray Bentos\» se había aguantado durante sesenta horas en la trágica circunstancia. La tripulación estaba formada por dos oficiales, seis soldados que fueron heridos y uno que fue muerto. Concedieron a los dos oficiales y al muerto la Cruz Militar, y a los demás el DCM y la Medalla Militar.
El ataque total falló. Los otros siete tanques, todos excepto uno fueron dañados o destruidos y uno se hundió en el fango.
Después de muchas tentativas, la 55a. División finalmente capturó \’Gallipoli\’ el 20 de septiembre de 1917.
!Qué historia!. .”.

DESCENDIENTES DEL CAPITAN DEL TANQUE FRAY BENTOS. El nieto y miembros de la familia del Cap. D.H.Richardson que comandaba el F41 FRAY BENTOS, visitaron el sitio exacto donde el tanque y su tripulación hicieron la proeza. El Coronel y soldados del 1st Royal Tank Regiment los acompañaron mientras se depositaba una ofrenda floral y un gaitero ejecutaba un lamento en recuerdo a los caídos. (Foto)

UN SITIO WEB PARA RECORDAR. Hemos hecho un sitio en Internet para resaltar todo este material histórico respecto a los dos tanques de guerra llamados Fray Bentos. Se puede visitar en : https://sites.google.com/site/eltanquefraybentos/

El sitio donde se puede ver todo lo relativo al homenaje está en http://www.tankmemorial.vpweb.co.uk/default.html

 

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