Seminario sobre Desarrollo Integrado de la Protección de Patrimonio Cultural Intangible y el Turismo.
Ministerio de Comercio y Academia Central de Administración Cultural y Turística de la República Popular China
8-19/11/20121
“La creatividad es intangible, pero le da forma a la sociedad”, dice la UNESCO yo debo ponerla en práctica para en estos 10 minutos, lograr este desafío: me propongo provocar curiosidad, ante un público variado proveniente de China y de varios países latinoamericanos, para generarles el deseo de profundizar sobre lo que les presentaré apenas como pinceladas del URUGUAY.
Previamente, creo que debo ubicar geográficamente a nuestro país la República Oriental del Uruguay. Ya su propio nombre hace referencia a un río que es límite con nuestros vecinos y habla de en qué punto cardinal nos ubicamos respecto a ellos. Es que estamos rodeado de dos gigantes americanos-Argentina y Brasil- y esto ha dejado huellas en nuestra cultura.
Al referirnos a la Historia contamos con una muy breve, si comparada con la de la milenaria China. Nuestro origen es bastante inusual, producto de batallas pero también de sendas negociaciones. Es que nuestro puerto de Montevideo fue siempre considerado de gran valor estratégico, por eso es que llegaron de diversos sitios a intentar colonizarnos. Un relato que tiene que ver con este detalle justamente es un lugar considerado de valor patrimonial que es Colonia del Sacramento fundada por don Manuel Lobo, Gobernador de Río de Janeiro, designado por el Príncipe Pedro II de Portugal, para crear un punto de defensa sobre la costa este del Río de la Plata. Constituye el único ejemplo en la región, de un diseño de ciudad que no responde a la forma rígida, de damero, impuesta por España a sus colonias de América. En efecto, el trazado urbano, típicamente portugués, se adapta armoniosamente a la topografía del lugar conformando espacialidades calificadas y sorprendentes.
Desde que dejamos de ser colonia en nuestra vida independiente (un proceso que llevó de 1825 a 1830), se da una integración muy interesante de culturas locales y grupos de inmigrantes sobre todo provenientes de Europa.
La forma republicana y democrática de gobierno representa esa variedad y hoy somos líderes en Latinoamérica como democracia plena. Un interesante circuito turístico recorre nuestra capital, en el que se puede acceder a todas las etapas vividas hasta el presente como si fuera un libro con sorprendentes construcciones, edificaciones y monumentos icónicos de nuestra república.
Tradiciones, música, danza, teatro, cultura popular son apenas algunos de los múltiples ejemplos de las habilidades y del conocimiento que, de generación en generación, se va transmitiendo la continuidad de nuestra identidad. Nada más nombrar un reconocimiento obtenido este año, la obra arquitectónica de un ingeniero Eladio Dieste: la Iglesia Cristo Obrero de Atlántida fue construida entre 1958 y 1960. Se destaca no solo por el sistema estructural, sino también por la propuesta estética y la poética en el manejo de la luz y los espacios. Su sensibilidad artística y su gran conocimiento técnico le permitieron conjugar, de manera excepcional e innovadora, los recursos materiales propios de nuestro país; en este caso el ladrillo. Creo que esta obra es representativa de una condición que nos caracteriza, el ingenio. Con él logramos índices sorprendentes como el de alfabetización de un 98,7% o como el que somos el país de América Latina con más producción de libros por habitante. O el 97% de la electricidad proviene de fuentes renovables.
La UNESCO vela por esas manifestaciones que las considera de valor patrimonial intangible . Voy a nombrar dos: el tango y el candombe.
El tango es una manifestación cultural urbana conjuga música, danza y poesía propia de una época en la que confluyeron inmigrantes europeos, descendientes de esclavos africanos, gauchos llegados del campo y criollos nacidos en la ciudad. Surge entre las clases populares de Montevideo y Buenos Aires, nacido a orillas del Río de la Plata.
Desde sus orígenes en el siglo XIX la comunidad tanguera, se encuentra viva y pujante en nuestros días, incluye entre otros a músicos y compositores, bailarines profesionales y aficionados, coreógrafos y profesores, orquestas y cantantes. No podemos olvidar a Carlos Gardel en Uruguay y su departamento Tacuarembó poseen documentación de su nacimiento en estas tierras el cantante de tango más popular de todos los tiempos. Está grabado en nuestro ADN y es testimonio de nuestra identidad y de la diversidad que nos constituye.
Por otro lado el candombe, mezcla de música y danza, un espacio sociocultural, concebido como una práctica comunitaria, nacida en el seno de una veintena de comunidades africanas que fueron traídas a América del Sur como población esclava, el candombe es la música, la danza que hoy también nos representa.
Esa vieja tradición de origen negro superó todas las barreras, venció el paso del tiempo y, contra todo pronóstico, sigue impregnando hasta hoy la cultura uruguaya, en una forma recreada, imponiéndose como una de sus expresiones musicales más celebradas, elocuentes y distintivas.
Aunque encuentra su momento de mayor visibilidad durante el Desfile de Llamadas que se celebra cada carnaval, el candombe está vivo y presente en los barrios de Montevideo todo el año. con sus distintivos “toques”, hacen vibrar a su manera los tres tambores: piano, chico y repique. En una forma singular cada barrio hace sonar lonjas lo que constituye su seña de identidad y les permite distinguirse y dialogar a la vez.
Para cerrar les invito a ver a nuestro país como una caja de sorpresas, que puede destacar por un partido de fútbol increíble como aquel en el que fuimos los primeros campeones del mundo, o por ser exportadores líderes en Latinoamérica de caviar sin ser productores naturales o de software con grandes avances en robótica y videojuegos. También por tener extensas celebraciones de carnaval con espectáculos populares donde la libre expresión es la característica. En perspectiva turística tenemos potentes avances referidos a turismo accesible y turismo inteligente con importantes reconocimientos internacionales. Además de solo observar el mapa se puede concluir erróneamente que nuestras bellezas naturales están basadas solamente en nuestra costa marina, lugares como Punta del este son una muestra, pero puedo asegurarles que hay más.. En un tiempo este territorio fue considerado como “una tierra sin ningún provecho” por no poseer yacimientos minerales, hoy quizás ese mismo aspecto es nuestro orgullo, expresado en forma sutil en estos versos de una canción de Jorge Drexler “un país con el nombre de un río, un edén olvidado, un campo al costado del mar”. En este tiempo en que nos dimos cuenta que las aglomeraciones no son pertinentes realizar una visita a estas latitudes puede ser muy saludable.